¡Feliz San Valentín!
Mis ranitas queridas, hoy es un día especial. ¡Es el día de los enamorados! Espero que si tenéis pareja paséis un día del todo romántico y especial y si no, ¡también! ¿Quién ha dicho que las personas que estamos solteras no podemos tener un día especial también? Yo, por ejemplo, tengo varias citas, una de ellas con cierto entrenador/CEO de una serie coreana… Un día os hablaré de esto. Pero hoy no es ese día.
Hoy os quiero recomendar algunos de mis libros de romance favoritos. ¡Empecemos!
Si hablamos de romance, uno de los títulos que primero se me viene a la cabeza es el de mi queridísima trilogía Maitland, de Julie Garwood. El Secreto, el primer libro de esta saga, no es el primer libro de romance que leí ni por asomo, ni siquiera fue el que me enganchó a este tipo de libros. Sin embargo, es por mucho mi favorito. Tanto El Secreto como El Rescate son dos libros en los que me refugio cada vez que tengo una crisis lectora; hacen que me vuelva a enamorar de sus personajes, que vuelva a sentir esa magia de los libros de romance. Estos tres libros (El Secreto, El Rescate y La música de las sombras) hablan de las Highlands, esas tierras altas de la Escocia medieval, que muchos ingleses tomaban por tierras de salvajes. Hablan de tres lairds (Ian Maitland, Brodick Buchannan y Colm MacHugh), de cómo conocen a las protagonistas y todo lo que pasa a su alrededor, que no es poco. Los sentimientos, las emociones que transmite Julie Garwood al escribir son tan fuertes que casi se respiran y queda patente en estas maravillas; por ello, si queréis enamoraros de tres hombres un tanto… complicados, dejémoslo ahí, debéis leer estos libros.
Siguiendo con esta temática de romance histórico, tengo que mencionar a la gran Jude Deveraux. Ella fue mi primera autora de romance, con Canción Audaz (que ya me vale a mi también, empezar por el quinto libro de la saga. En mi defensa diré que era joven e inexperta). Fue también el primer libro donde se exponía de forma explícita una relación sexual y a mi eso me encantó, porque no lo hacía de forma vulgar, que pareciese que estaba leyendo algo malo o morboso, incluso prohibido (tenía como 14 años, el sexo para mi era algo «prohibido». Una larga historia), sino de una forma natural, elegante, delicado pero a la vez que transmitía mucha pasión. Quiero destacar esta saga, de la familia Montgomery, que es con la que empecé. Tengo que avisaros que es una saga bastante extensa, de la que yo apenas me he leído tres o cuatro libros porque no los encuentro todos. Cuenta la historia de los diferentes miembros de la familia Montgomery desde finales de 1200 hasta finales de 1900. Vamos, que tenéis historias para aburrir. Los personajes te enamoran, tanto ellos como ellas, porque tienen personalidades tan dispares y tan bien trabajadas que parecen reales; y además, la historia de cada uno te atrapa tanto que por eso quieres seguir con los demás libros, porque los secundarios de uno, pueden ser los protagonistas de otros. Y es fabuloso.
Si por el contrario queréis un amor más actual, os recomiendo la trilogía que no sé bien como llamarla, pero seguro que muchas de mis ranas (y los que no son ranas) la conocen. Son los libros de Stephanie Perkins Un beso en París, Lola y el chico de al lado y Felices por siempre jamás. Son novelas mucho más juveniles que las anteriores, el amor, por tanto, es más inocente (al menos en las que yo me he leído, que son las dos primeras). Si tuviera que comparar las sensaciones, diría que es como un amor de adolescencia, lo que no le quita, para nada, su autenticidad. Estos libros están llenos de ilusión, frescura, de ese amor de juventud intenso y melodramático que, aunque lo neguemos, nos encanta.
Pasamos a una recomendación que no es mía, sino de una de mis mejores amigas. Lleva mucho tiempo dándome el coñazo diciéndome que lea la saga de La Hermandad de la Daga Negra de J. R. Ward. Trata de unos vampiros, de la Hermandad de la Daga Negra, y su lucha contra los Lessers o restrictores. Mientras estas luchas tienen lugar, cada miembro de la hermandad tiene su historia propia, que son las que se narran a lo largo de los libros. Por lo que me ha dicho, no solo los personajes sino la historia es interesante, lo que hace que tenga ganas de leerla. Y que os la recomiende altamente.
Y por último, mi gran obsesión. Todos aquellos que me sigáis por Twitter sabréis lo enamorada que estoy de esta saga sobrenatural. Dentro de poco subiré algo más detallado sobre su autora y ella, pero hoy os la debo recomendar porque, si no, sería muy mala fan. Estoy hablando de la estupenda, maravillosa, increíble saga de Psi-Cambiantes de Nalini Singh. Qué puedo decir de ella. Desde hace unos años, es mi saga por excelencia, mi obsesión, la razón por la que respiro (¿Exagerada yo? ¿Cuándo). Es un mundo donde existen tres razas: los humanos, los psi y los cambiantes. Los primeros son personas normales y corrientes, lo que es un humano real, vaya. Los psi son seres con aspecto humano pero que tienen capacidades mentales increíbles, además de estar todos conectados por una red mental, la Psi-Net (que por como la describe la autora, tiene que ser preciosa) Y por último, están los cambiantes, que son mitad humano, mitad animal. Dentro de ellos conviven ambas mitades, lo que les permite transformarse en forma animal. No es el típico «hombre-lobo», sí que existen cambiantes lobo pero también existen, por ejemplo, cambiantes rata o cambiantes halcones. Sobre la historia, tendréis que esperar unos días para saber más detalladamente, pero para ir abriendo boca os diré que la historia es muy buena, todos los personajes están muy trabajados y a medida que vas leyendo los libros (que son una burrada; en español sólo hay diez y sufro, sufro mucho) os dais cuenta de que ni el bueno es tan bueno ni el malo tan malo y van surgiendo más tramas libro tras libro y tú sólo quieres leer más y más y luego te enteras de las parejas de los libros posteriores y claro, como la gran mayoría son personajes secundarios que ya conoces, pues mueres del hype por leerlos. True Story.
Para mi, estas novelas son ideales para cualquier época del año, pero mucho más para San Valentín. Espero que os haya servido para encontrar nuevas lecturas y abriros un poco más a la literatura de romance no tan juvenil.